El delantero uruguayo del París Saint Germain (PSG) Edinson Cavani y su compañero argentino Javier Pastore tendrán que dar explicaciones a su entrenador, el español Unai Emery, por no haber acudido, el miércoles y el jueves, a los dos primeros entrenamientos tras las vacaciones de Navidad y Año Nuevo.
Emery indicó este viernes, en conferencia de prensa antes de un nuevo entrenamiento -al que finalmente acudió Cavani, pero no Pastore-, que tenía intención de escucharles. «Voy a esperar a ver cuáles son sus argumentos», dijo.
«Cuando lleguen, los veré individualmente, pero el club también. Después, veremos lo que ocurre», subrayó el entrenador, que señaló que los dos habían avisado de que llegarían con retraso a la vuelta de las vacaciones.
«Es verdad -añadió- que habría sido mejor que los jugadores hubieran estado con el grupo desde el miércoles. Pero como he dicho, los vamos a escuchar».
El entrenador vasco comentó que los jugadores del equipo que sí volvieron al trabajo el miércoles han tenido un programa para el partido de liga del próximo domingo en Rennes, que han reanudado el entrenamiento «con muchas ganas y mucha motivación» y que estarán listos «mental y físicamente» para ese desplazamiento a la ciudad bretona.
También señaló que la mejor preparación para la eliminatoria de la Liga de Campeones frente al Real Madrid en febrero es este mes de enero con «muchos partidos».
«El club -recordó- tiene como objetivo ganar todas las competiciones en las que está. Habrá que aguantar el ritmo, por lo que el encadenamiento de partidos estas próximas semanas es la mejor preparación posible».
Cavani se presentó esta tarde en el complejo del PSG del Camp des Loges acompañado de su hermano y de su agente Walter Guglielmone y se entrenó aparte del grupo.
Según la emisora «RMC», el entorno del delantero justifica su ausencia en los dos primeros entrenamientos de año por un problema familiar, mientras que el club sospecha que el uruguayo quiso alargar las vacaciones en su país. La consecuencia es que su presencia en Rennes está comprometida.
En cuanto a Pastore, «RMC» señaló que para el club de París el argentino quiere ponerle más presión porque se niega a dejarle que se vaya, que es lo que él quiere.
El PSG había señalado estos dos últimos días que la ausencia de Cavani y Pastore en los primeros entrenamientos del año se debía a «razones personales». Eso pese a que el martes había anunciado que después de once días de vacaciones el equipo estaría al completo en la primera sesión, al día siguiente, lo que no se cumplió.
Cavani es reincidente, ya que en 2015 tampoco se presentó (igual que su compañero de entonces Lavezzi) en el primer entrenamiento de ese año tras las vacaciones. Eso le costó una sanción del club, que consistió en quedar apartado del equipo durante una semana y verse privado de dos partidos.
Un año después, el entrenador de entonces, Laurent Blanc, había alegado «un problema de comportamiento» del uruguayo para apartarlo del grupo durante buena parte de los meses de enero y febrero.
EFE