Liverpool consolidó su lugar en la cima de la Liga Premier al derrotar el domingo 3-1 al Manchester City, con lo que toma una ventaja de ocho puntos sobre su más cercano rival luego de 12 jornadas.
El brasileño Fabinho y el egipcio Mohamed Salah anotaron en los primeros 13 minutos de juego antes que el senegalés Sadio Mané ampliara la ventaja luego del medio tiempo en la 11ma victoria en 12 partidos del invicto Liverpool, que busca alzar su primer campeonato desde 1990.
Dificultando aún más las aspiraciones del City por un tercer título seguido, Leicester y Chelsea se encuentran justo detrás de Liverpool mientras que los actuales campeones se ubican en el cuarto puesto, nueve puntos debajo del líder.
“Es una locura, nueve puntos”, declaró el técnico de Liverpool, Jurgen Klopp. “Uno no imagina que algo como esto pueda ocurrir”.
Al final de la temporada pasada en mayo, tan solo un punto separó al City y al Liverpool. Ahora hay un abismo entre el campeón inglés y el campeón europeo.
Mientras que la pelea por el título la campaña pasada fue tensa y emocionante, el camino de Klopp luce menos complicado esta vez.
“Otras personas de antemano han afirmado que es 100% seguro que el Liverpool pierda el liderato”, añadió Klopp. “Bueno, ese es un enfoque muy negativo, pero pueden verlo de esa forma. No nos importa.
“No es relevante porque ¿quién quiere ser el líder a principios de noviembre?”, dijo Klopp. “Uno quiere ser el número uno en mayo”.
Incluso los aficionados de Liverpool refrenaron su odio a la llegada del autobús del City a Anfield. Nadie lanzó objetos ni quebró ventanas del vehículo como en 2018. Sólo un coro de abucheos cuando el técnico del equipo visitante se escabulló por las estrechas calles hacia el estadio.
El City pensó que el árbitro debió marcar un penal a los cinco minutos cuando el brazo derecho extendido del defensor Trent Alexander-Arnold hizo contacto con el balón. Pero el mediocampista portugués Bernardo Silva, del City, de antemano había cambiado el rumbo del balón con la mano.
Mientras que en Manchester, con un disparo que pegó en la parte interna del travesaño, Marcus Rashford completó la victoria del local United de 3-1 sobre Brighton.
Andreas Pereira puso arriba al United a los 17 minutos antes que Davy Propper cometiera un autogol dos minutos después para el 2-0. Rashford amplió la ventaja a los 66 justo después que Lewis Dunk acortara distancia, en un resultado que mandó al United al séptimo lugar de la tabla de posiciones.
Brighton nunca se vio cerca de apuntarse su primer triunfo en Old Trafford, donde una lesión aparentemente seria de Scott McTominay cerca del final prendió las alarmas.
Fue una mejor tarde para Brandon Williams, su compañero en las fuerzas básicas, quien abandonó el partido ante una ovación de pie tras una impresionante actuación en su primer juego como titular en la Premier.
United mostró pocas señales de fatiga luego de vencer al Partizan de Belgrado en la Liga Europa el jueves y metió en apuros a la defensa del Brighton desde el inicio.
Rashford no supo aprovechar una soberbia jugada ofensiva para romper el empate a cero en la primera oportunidad clara de los visitantes, pero los pupilos de Ole Gunnar Solskjaer abrirían el marcador a los 17 minutos.
Victor Lindelof y el mediocampista brasileño Fred participaron en una jugada que culminó con otro brasileño, Andreas Pereira, atacando por la zona media.
Una embestida de Dale Stephens parecía poner fin a ese intento, pero el balón fue a dar a los pies del delantero francés Martial, que dentro del área devolvió el balón al brasileño, que mandó un disparo que pasó sobre Dunk antes de entrar a la portería del Brighton.
En otro duelo, el mediocampista portugués Rúben Neves y el mexicano Raúl Jiménez dieron al local Wolverhampton Wanderers un triunfo de 2-1 sobre Aston Villa, lo que puso fin a un mes de espera de un triunfo en la Liga Premier.
Wolves se mantiene invicto en siete partidos y se colocó a un solo punto debajo del quinto puesto, ubicándose en el octavo lugar.
Por su parte, el Villa se halla tres puntos sobre la zona de descenso y sufrió la ausencia por lesión de su capitán Jack Grealish.