Una vez que Andy Ruiz logró algo que muchos pensaron que sería imposible, pregona a todo el mundo que no hay imposibles y que uno puede llegar tan lejos como se proponga, como incluso ser el nuevo rostro del boxeo mexicano.
En una de las últimas citas de Andy en suelo mexicano antes de volverá su residencia en California, el multicampeón de peso pesado habló de otro referente del pugilismo tricolor, el también multicampeón mundial Canelo Álvarez.
«Quiero ser como Canelo o hasta más grande», dijo Andy en charla con ESPN dentro de las instalaciones del Centro Deportivo Olímpico Mexicano. «Quiero ayudar a las personas, a las familias, a los niños, es un sueño grande ser campeón del mundo y yo los quiero ayudar y apoyar a todos los boxeadores», añadió Ruiz.
Canelo es el actual rostro del boxeo mexicano en compañía de otros peleadores de muy alto calibre como el propio Andy Ruiz y otras figuras de la talla de Juan Francisco Estrada, Miguel Berchelt, Óscar Valdez, Gilberto Ramírez, Emanuel Navarrete, Rey Vargas, Jaime Munguía, Luis Nery y Leo Santa Cruz, por mencionar a aquellos que relevaron a la camada de leyendas como Érik Morales, Juan Manuel Márquez y Marco Antonio Barrera.
Y si bien es cierto que en popularidad el golpe que dio Andy Ruiz fue definitivo, sabe que en su próxima pelea, ya sea la revancha con Anthony Joshua o una pelea ante otro rival, debe hacer lo necesario para salir con la mano en alto y confirmar que no fue sólo una noche brillante la que tuvo en el ring de Nueva York.
Por ello, Andy cree que será necesario ajustar algunas cosas en el gimnasio antes de pensar en cualquier otra cosa, pues lo físico será prioridad a la hora de ponerse los guantes. «Poner (convertir) la grase en músculo y entrenar un poco más y ser más inteligente afuera del ring, cuidarme», apuntó.
Sobre la idea de bajar de peso, Manny Robles, el entrenador de Andy, dijo que es buena idea, pero no hay que olvidar que «esto es boxeo, no fisicoculturismo», y aseguró que precisamente el físico es lo que ha hecho a Andy un peleador aún más especial que otros monarcas de peso pesado.
