Las Chivas cayeron en el partido por el quinto lugar ante el campeón de África, el Esperanzas de Túnez, 6-5 en la tanda de penales tras empatar 1-1 en los 90 minutos. El Rebaño no pudo con el equipo tunesino a pesar de que terminaron con nueve por dos expulsiones.
En la primera jugada, apenas a los dos minutos de haber empezado el encuentro, el Rebaño se encontró con un golpe de suerte gracias al VAR. Ángel Zaldívar cayó en el área tras una fuerte barrida que tuvo que ser evaluada por el árbitro con ayuda del videoarbitraje. Tras varios minutos, de revisión, se marcó la pena máxima que fue convertida por Gael Sandoval. Gol de vestidor y escenario inmejorable para que el conjunto rojiblanco se despidiera de manera decorosa.
A pesar de la anotación, el trámite del primer tiempo fue un calvario para las Chivas. Los de Cardozo cedieron por completo la posesión del balón y conforme pasaron los minutos, el equipo tunesino fue creciendo en funcionamiento, pero sin crear peligro en la portería de Gudiño.
Hasta el minuto 37, la polémica y el VAR se hicieron presentes de nuevo. Tras un cabezazo en un tiro de esquina, José Carlos Van Rankin desvió el balón con la mano y se marcó otro penal. Youcef Belaili fue el encargado de tirar el penal y empató el marcador tras engañar a Raúl Gudiño.
Para el segundo tiempo, el ritmo semilento del partido continuó, pero el momento emotivo llegó con la entrada de Carlos Salcido, quien se despidió del conjunto rojiblanco y, además, recibió el gafete de capitán por parte de Jair Pereira.
El encuentro siguió con ambos equipos cuidándose de no recibir un gol más.Aunque las Chivas propusieron más, no tuvieron éxito. Incluso, el equipo africano se quedó con 10 tras una doble amarilla de Anice Badri, luego de una serie de empujones con Isaác Brizuela, que le valió la segunda amarilla.
La jugada más clara de los de Cardozo llegó hasta el minuto 80 con un tiro de Michael Pérez de fuera del área que desvió bien Rami Jeridi. Antes de que terminaran los 90 minutos, Houcine Errabei vio la roja directa tras una fuerte entrada sobre el ‘Conejito’ Brizuela.
El encuentro se fue directo a los penales, donde se definió tras ocho disparos. Por parte de los mexicanos, Hedgardo Marín y José Carlos Van Rankin fallaron sus tiros, pero Miguel Jiménez, quien entró al minuto 90 por Raúl Gudiño, mantuvo la esperanza de los rojiblancos.
Sin embargo, Isaác Brizuela, el que mejor había jugado durante los 90 minutos, falló en la muerte súbita y Chamseddine Dhaouadi clavó el último penal, para firmar el fracaso del Rebaño.
Con esto, las Chivas firmaron la peor actuación de un equipo mexicano en el Mundial de Clubes, tras quedarse con el sexto lugar.