Paola Longoria buscará ganar su décima medalla en Juegos Centroamericanos. Esta madrugada viajó en el tercer contingente de atletas a Barranquilla para el inicio de la justa regional y aunque participará en sus cuartos Juegos cómo la mejor raquetbolista del mundo, reconoció que siempre existe la presión.
Me emociona representar a México, tengo probabilidad de sumar 10 medallas en todas las justas centroamericanas. Siempre existe la presión, pero intento manejarla como motivación, llegar en la cima del ranking implica tener presión”, comentó la deportista.
Reconoció que siempre se esperan buenos resultados de su deporte para México en los Juegos Centroamericanos y que ahora no ha sido la excepción.
“La delegación de raquetbol es una de las potencias en los Juegos Centroamericanos y nos trazamos objetivos muy claros antes de viajar”, indicó.
A finales de junio su participación en la justa se puso en duda por un problema con la Agencia Mundial Antidopaje. La mexicana no presentó la calendarización de sus competencias y recurrió a una falta denominada como “paradero”. Aunque el asunto se resolvió sin ninguna sanción, aseguró que si le generó frustración.
“Si se siente presión, siempre he jugado limpio y me puso un poco nerviosa y frustrada por esta situación, pero lo he dicho si uno actúa bien todo se aclara. La WADA y la IRF tomaron la mejor decisión y el historial de controles antidopaje hablan por sí solos”, explicó.
