Los Golden State Warriors vencieron a los Houston Rockets 101 a 92 para llevarse el campeonato de la Conferencia Oeste y acceder a las Finales, para enfrentar a los Cleveland Cavaliers, por cuarta vez consecutiva.
Ésta es la primera vez en la historia de la NBA que dos equipos logran semejante hazaña, lo que exhibe la calidad de dos de los jugadores más importantes de los últimos años en el deporte ráfaga profesional.
El Toyota Center se convirtió en una verdadera zona de guerra y los Rockets tenían todo a su favor para poder acceder a las Finales, para verse las caras con LeBron James y los Cavs; sin embargo, los Warriors no se dejaron sorprender por el público, con más de 18 mil aficionados apoyando a los locales, para sentenciar su pase.
La quinteta de California sufrió durante el primer cuarto; Harden y compañía respondían como esperaba el público y se fueron adelante en el marcador tras los 12 minutos. Nada cambiaba en el segundo capítulo, y los Rockets estaban dando ese salto para sellar su presencia en la lucha por el campeonato.
Pese a esto, la historia sufrió un ‘giro de tuerca’ tras el descanso. Golden State recobró aquello que no había hecho en dos cuartos y, de la mano de Stephen Curry, encontraron la fórmula para cambiar el marcador a su favor, culminando el tercer episodio 76-69.
La historia terminaría escribiéndose en el capítulo final, cuando los Rockets dejaron atrás su buen comienzo y tuvieron que remar contra corriente, siendo ineficaces y cayendo ante la gran ofensiva encabezada por Curry y Durant, que catapultó a los Warriors de regreso a un enfrentamiento contra el Rey.
Ahora, Golden State tendrá la fortuna de recibir a los Cavs, el próximo jueves 31 de mayo, en la Oracle Arena, donde se medirán frente a frente y comenzar la que será una nueva batalla por la consecución del trofeo de la NBA.